Hoy quiero invitarte a reflexionar sobre la vocación. Hace pocos días nuestros adolescentes rindieron la PSU, y al parecer sólo se les ha preparado en empleabilidad, en ofertas laborales, y dinero asociado al trabajo.
Creo que es importante detenernos a pensar en qué llamado tienen esos jóvenes, referido a cuál es su vocación y qué sueños tienen. Se trata de conocer sus pasiones, lo que les hace palpitar el corazón.
Y esa búsqueda puede ser muy diversa, desde estar al aire libre o sentado en una oficina, realizar un oficio y no una profesión. Creo que hay que darles espacio para que busquen dentro de su interior, y es algo que falta mucho por hacer.
¡Un abrazo!