Los autores de un nuevo libro de la caída de las Torres Gemelas revelaron un encubrimiento de la complicidad saudita en los ataques terroristas del 11 de septiembre de 2001, afirmando que la CIA y Arabia Saudita conspiraron para mantener en secreto los detalles de ese fatídico día. En “The Watchdogs Did not Bark: La CIA, la NSA y Los Crímenes de la Guerra Contra el Terror”, John Duffy y Ray Nowosielski escribieron varias versiones de ex funcionarios de inteligencia estadounidenses que revelaron cómo las agencias del gobierno ignoraron la inteligencia sobre los saudíes.
Los ataques terroristas del 11 de septiembre condujeron a las guerras en Afganistán e Irak, y también permitieron que algunas personas en Washington DC empujaran a los EE.UU. más cerca de ser un estado policial virtual de seguridad nacional. Los funcionarios de la CIA inexplicablemente les impidieron informar a sus cuarteles sobre los futuros conspiradores de Al Qaeda presentes en los Estados Unidos en 2000 y nuevamente en el verano de 2001.
En su libro, Duffy y Nowosielski han presentado una actualización sobre lo que se ha aprendido sobre el apoyo de Arabia Saudita a Al-Qaeda en los últimos años. Las investigaciones estadounidenses revelaron que funcionarios del Ministerio de Asuntos Islámicos del Reino Saudita ayudaron a los secuestradores a establecerse en California. “Sabían que eran Al-Qaeda el día que llegaron a Los Ángeles. Así que cualquier noción del gobierno saudí que diga: ‘Oh, solo ayudamos a todos los saudíes aquí’ es falsa. Ellos sabían. Y la CIA lo sabía”, dijo Andrew Maloney, un abogado de las familias de las víctimas del ataque del 11 de septiembre.
El Dr. Kevin Barrett, miembro fundador del Panel Científico para la Investigación del 11-S, dijo que 15 de los “secuestradores” del 11S de Arabia Saudita eran en realidad agentes de la CIA que trabajaban para el gobierno de los Estados Unidos. Las autoridades estadounidenses afirman que los ataques fueron llevados a cabo por 19 terroristas de Al-Qaeda, pero muchos expertos han planteado preguntas sobre la cuenta oficial. Creen que los elementos deshonestos dentro del gobierno de los Estados Unidos, como el ex vicepresidente Dick Cheney, orquestaron o al menos alentaron los ataques del 11 de septiembre con el fin de acelerar la maquinaria de guerra de los EE.UU. y avanzar en la agenda sionista.
